Antes de su presentación con invitadas, en el ciclo AcercArte, la artista habló con LA CAPITAL de sus proyectos y la vocación por la docencia. El valor de programas como Acercarte, para llegar a distintos públicos.
a cantante Patricia Sosa, tendrá a su cargo el show principal de cierre de la segunda semana de Acercarte en Mar del Plata. Y lo hará con un recital muy especial, en el que contará, como invitadas, con otras tres destacas voces de la escena musical argentina: Marcela Morelo, Hilda Lizarazu y Luciana Segovia de Cirse.
Antes del espectáculo, la pionera del rock argentino habló con LA CAPITAL de los discos en los que está trabajando -incluso uno de folklore- de su vocación por la docencia y valoró la diversidad del rock en la actualidad. “En el fondo soy una rocker que canta lo que le da la gana”, confió y aseguró que, quienes cuentan con un don, tienen “la obligación” de compartirlo.
– ¿Cómo te preparás para el show de Acercarte?
– Es maravilloso tocar en este tipo de escenarios, porque es una producción como si vinieran los Rolling Stones, con pantalla, iluminación y sonidos espectaculares. Además, me llena de felicidad porque se acerca muchísima gente, gente que te sigue y te conoce y gente que no, entonces es una oportunidad de llegar a nuevos públicos, de sumar.
Voy a estar con mi banda de siempre, van a estar los temas que la gente siempre quiere escuchar, los éxitos, temas que hice con Chucho Valdés y con invitadas: Marcela e Hilda, que son amigas y Luciana Segovia, cantante de Cirse, banda de hard rock muy fuerte, quien me identifica mucho con mis comienzos.
– Has transitado mucho pero siempre mantenés la esencia del rock.
– En el fondo, soy una rocker que canta lo que se le da la gana.
Patricia Sosa con Fabián Perechodnik, secretario general del gobierno de la Provincia de Buenos Aires.
– ¿Cómo observás la escena del rock en la actualidad?
– Hay una cantidad de posibilidades de elección maravillosa. Muchos estilos. Los ghetos no están más y eso me encanta. Me encanta que convivan. No entiendo todos, pero hay una vidriera maravillosa y un under muy poderoso.
– ¿Es importante como semillero?
– Sí, hay rock en todos lados y eso de gestar cultura es importante porque viene de la semilla, es genuino.
– ¿Estás trabajando en algún disco nuevo?
– Ahora, entre la gira de verano y los show de festivales, me voy a meter en el estudio a grabar un disco de folclore, porque Oscar -Mediavilla, su pareja- me está insistiendo hace rato. Y en abril, vuelvo al estudio a grabar un disco, con canciones de mi estilo.
– Además estás con tu escuela…
– Sí, El templo de la voz se está agrandando. Estamos de mudanza. Es un espacio en el que el canto es un vehículo de respiración, de meditación, de sanación. Y además, en la parte de atrás, estamos creando el Templo del Arte, un centro cultural en el que artistas que recién comienzan puedan mostrar lo que hacen. ¡Hay tanto artista dando vuelta! E incluso en la escuela hay gente que iba como terapia, que no pensaba en un escenario y al tener la posibilidad les empieza a gustar y a cambiar la vida.
– ¿Cómo surgió en vos esa vocación por la docencia?
– Me parece que es una obligación y es parte de la misión, cuando uno tiene un don, cuando el altísimo o la fuente te dan un don, respetarlo, cuidarlo y compartirlo. Lo comparto porque canto, pero además, compartir lo que aprendiste es muy hermoso. Es difícil hacerlo, a veces me pongo nerviosa porque en canto hablamos de cosas muy difíciles de graficar y soy un poco obsesiva, pero tengo 10 docentes maravillosos, mejores que yo.
– Tomo algo que dijiste recién para que te explayes ¿Cantar es como un mantra, como una meditación?
– Hay una cuestión de encontrar el sonido propio, de no querer parecerse a nadie. cuando encontrás ese sonido, empezás a vivar internamente, es como decir OM. Vocalizar con tu propio sonido interior es una meditación consciente, se unen los 7 chakras con el universo, fluye y es irremplazalble. Y como todo, lograrlo es un entrenamiento.
En familia
Luego del show de esta noche, Patricia Sosa se quedará unos días en Mar del Plata, por una razón muy especial. “Me quedo porque mi hija, Marta, está haciendo una obra de teatro. Y quiero verla, acompañarla”.
La obra en cuestión “Loop, amor sin fin”. “Es muy divertida, actual, muy de estos tiempos de Whatsapp”.
La obra sube a escena los martes y jueves en el Teatro Melany, con la modalidad “a la gorra”.
Amplia trayectoria
Cantautora con influencias de rock, soul y blues, Patricia Sosa ha incursionado en el campo de la actuación con participaciones en televisión, cine y teatro. Esposa del productor Oscar Mediavilla, su carrera musical comenzó en 1974 cuando se incorporó a la banda Nomady Soul, en la que cantaba en inglés.
Realizó giras internacionales y permaneció allí por seis años. Luego de abandonar la formación se unió al grupo La Torre, marcando todo un nuevo estilo para las mujeres en el rock.
En 1990 comenzó una exitosa carrera solista, en cuyo transcurso lleva editados una decena de discos de estudio y en vivo. También ha escrito cuentos y musicales para teatro, y ha sido galardonada con varios premios Konex y ACE, además del Gardel 2007 al Mejor Album de Pop – Solista Femenina. Actualmente está presentando su último disco, Señales y el material grabado junto al pianista de jazz cubano Chucho Valdés.